MANTENIENDO AL JEFE CONTENTO
Siervos,
obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro
corazón, como a Cristo; 6no sirviendo al ojo, como los que quieren
agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la
voluntad de Dios; 7sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a
los hombres, 8sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ése recibirá
del Señor, sea siervo o sea libre. (Efesios 6:5-8)
Empecé a trabajar hace un poco más de
un mes y ha sido una gran experiencia hasta ahora; me gusta mi trabajo y he
tenido buena relación con mis colegas y jefes. En mi trabajo yo tengo la
responsabilidad de cumplir lo que me encargan, pero es interesante que
involuntariamente me siento más responsable cuando tengo al jefe enfrente; hasta
me siento derecho en la silla haha. No sé si alguna vez has tenido una
situación en la que tenías una responsabilidad donde actuabas de una forma pero
delante de la autoridad, de otra forma.
Tenemos muchas responsabilidades y
autoridades en todos lados: colegio, universidad, trabajo, en la casa con mamá, en el MJP o ministerio
donde estes sirviendo… Pero te has preguntado si, ¿estás sirviendo/trabajando/obedeciendo
con integridad? Dios es bien específico con sus hijos al enseñarnos que no
debemos servir al OJO. ¿Por qué? Porque aunque el jefe/padre/maestro/líder no
está siempre viendo, Cristo si lo está y Él es a quien verdaderamente servimos.
Su Palabra dice honra a tus padres,
obedece a tu amo, honra al que merece honra y como es Él quien lo dice,
entonces nuestra responsabilidad viene a ser primeramente con Cristo.
No se qué cargas o tareas tengas hoy,
pero medita por un momento por quien lo
haces, quien te lo va a reconocer, a quien le tenes que responder por eso. Hay
veces que los maestros ni revisan la tarea, pero Dios si ve el esfuerzo; a
veces un jefe solo regaña y no se fija en lo bueno que haces, pero Efesios nos
enseña a servir a Dios y no al hombre (o mujer!). Te aseguro que vas a preferir
una recompensa y el reconocimiento de Dios, a una palmada en la espalda de
alguien más. Asegurate hoy de mantener contento al Jefe que está más arriba, Él
es el que más importa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario