¿Y si fallo?
Estoy seguro que todos en algún momento momento fallamos en lo que hacemos. Este tiempo de desafío no es la excepción. Es muy probable que desde la primera semana, o incluso desde el primer día, fallaste en alguno de los retos. El verdadero problema no es fallar sino quedarnos cómodos sin hacer nada al respecto. En el libro de Apocalipsis (tranquilos, no entraremos en temas complicados!) , encontramos una forma en la que podemos enfrentar momentos en los que hemos fallado. Específicamente en el versículo 5 del capitulo 2 dice lo siguiente:
Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. (Apocalipsis 2:5 RVR60)
Quiero que te enfoques específicamente en la forma en que este versículo dice que debemos actuar cuando hemos dejado que otras cosas ocupen el lugar de Dios en nuestra vida, y que lo apliques en momentos en que sientes que has fallado en alguno de los retos que decidiste tomar durante el desafío. Hay 3 palabras o frases claves:
1. Recuerda de donde has caído. Es importante que identifiquemos rápidamente en que áreas o en que punto le has fallado a Dios.
2. Arrepiéntete. Aunque el hecho de fallar en alguno de los retos no significa necesariamente que has pecado,es importante que tengas claro y aceptes que fallaste y que necesitas hacer algo al respecto.
3. Haz las primeras obras. Comienza de nuevo! Pídele a Dios que te ayude a mantenerte firme en tu desafío. Pídele que nada te distraiga, que nada quite tu mirada de El.
Te puedo asegurar que Dios no quita su mirada de ti ni aun cuando fallas. El siempre nos ve con amor, como un Padre a su hijo. El estará siempre dispuesto a ayudarte cuando buscas de corazon hacer su voluntad.
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