Tus Cargas
Donde estudio hay una niña que tiene un problema en
sus piernas y necesita la ayuda de un objeto para poder apoyarse y caminar.
También necesita de personas que la ayuden a subir las escaleras cada mañana.
Cuando veo que todavía nadie se ha ofrecido a ayudarla, me acerco a ella y la
ayudo. Las primeras veces que intenté hacerlo noté que ella no confiaba en mi
(ni siquiera me conocía, ¿cómo podría?), se ponía nerviosa de que yo pudiera
dejarla caer. Luego el tiempo pasó y ya la sentía más tranquila. Llegó un
momento que tuvo la confianza hasta de darme su mochila porque sentía mucho
peso esa vez.
Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan
cargas pesadas, y yo les daré descanso. Mateo 11:28
Lo que trato de decir con este ejemplo es que mi relación con Dios ha
sido similar a esta historia:
1. Él se ofreció a ayudarme una y
otra vez, aun cuando yo no quería
2. Empecé a confiar en Él con el tiempo
Pero llegó un momento en donde la carga que yo llevaba (al igual que la
mochila de la niña), me costaba entregársela, AUN sabiendo que El es
todopoderoso y AUN con todas las demostraciones que me había dado de que es
digno de mi confianza. Pero ya no podía seguir luchando con mis propias fuerzas
y mi propio entendimiento. Finalmente me di cuenta que era tiempo de entregarle
todo sin reservas. El agarró mi carga, me quitó el peso muerto y me libró.
Sé que cuesta entregarle tu mayor lucha a Dios cuando todavía te da miedo
confiar completamente en El. Puede que te entre todo tipo de temor, sin embargo
te animo a que entregues lo que te impide ir cuesta arriba a Su lado. VALE LA
PENA que sea solamente El que se encargue de tu vida, no hay persona que te
levantará como Dios lo hace, porque cada mañana El te sigue escogiendo para
ayudarte a seguir caminando.
¿Qué cargas necesitas entregarle al Señor hoy?
Entrégale tus cargas al Señor, y él cuidará de ti; no permitirá que los justos
tropiecen y caigan. Salmos 55:22
No hay comentarios:
Publicar un comentario